Hace unos días me contaron una pequeña historia, que me agrado
mucho y esta vez vengo a contárosla a vosotros, y a deciros que opino sobre
ella.
“Un profesor enseña un billete de 20 € y le dice a sus
alumnos: -"¿A Quién le gustaría tener este billete? "- Todos los
alumnos levantan la mano.
Arruga el billete y les pregunta: -"¿Aún lo queréis?
"- Las manos suben de nuevo.
Él lanza el billete arrugado contra el suelo, salta encima y
dice: -"¿Seguís queriéndolo? "- Los Alumnos levantan la mano.
Entonces les dijo:
-"Amigos míos, ustedes han aprendido una lección muy
importante, hoy:
Aunque he arrugado el billete, lo he pisoteado, lo he lanzado,
habéis querido tener el billete, porque su valor no había cambiado, seguía con
un valor de 20€.”
Varias veces hemos podido pasar por momentos en los que la
gente nos ofende, nos rechaza, o los acontecimientos nos derrumben.
Sentimos que no valemos nada, o que no merecemos la pena. Pero
aquí es cuando te das cuenta, que a pesar de los golpes, que a pesar de que
hayas pasado por miles de malos momentos, tú sigues valiendo lo mismo. Siempre.
Nunca menos.
Buena suerte, chicos.